Un millón de personas, según los organizadores de la
movilización, se volcaron a las calles de la capital venezolana para revocar al
presidente Nicolás Maduro. La contramarcha oficialista, quien reunió hasta
30.000 simpatizantes del gobierno, de acuerdo con sus cifras.
A partir de las 8 de la mañana del pasado 1 de
septiembre los primeros manifestantes empezaron a reunirse en los 7 deferentes
puntos de concentración que los dirigentes opositores escogieron para realizar
la llamada Toma de Caracas, la más grande protesta registrada contra el
gobierno de Nicolás Maduro y sin duda, una de las más multitudinarias de la
historia venezolana.
Las razones para protestar fueron básicamente dos:
la crisis económica que vive el país, con escasez y la inflación más alta del
mundo y la exigencia al Consejo Nacional Electoral de un Referéndum Revocatorio
contra Maduro este mismo año.
“Por Venezuela, por los jóvenes, por los muchachos
que quieren y que tienen que hacer evolucionar este país y progrese, y no el
hambre que estamos sufriendo”, explicaba un manifestante visiblemente
emocionado.
“Porque yo son venezolana y soy de la Venezuela que
quiere que sus hijos y sus nietos crezcan aquí”, indicaba una marchista. “Que
se realice el revocatorio este año”, exigía.
“Estamos todos los venezolanos aguantado hambre,
miseria, necesitamos por favor sacar a Maduro porque es la única persona que
está dañando nuestro país”, argumentaba otra mujer presente en la marcha.
“Revocatorio ya, no podemos más”, agregaba.
Pero aquellos que vinieron de otras ciudades como
Valencia, Barquisimeto, Maracaibo o Puerto La Cruz, se toparon con un gran
bloqueo de las carreteras por parte de la policía nacional, que, sin ninguna
explicación, impidió por varias horas el paso de vehículos. Los manifestantes
no dudaron en bajarse y seguir a pie.
“En realidad lo que está pasando aquí: nosotros
venimos caminando de Guarenas en vistas de que en varias alcabalas [puestos de
control] tienen detenidos los vehículos para impedir que lleguemos a nuestra
marchas”, deploraba una joven. “Estamos indignados, tuvimos que salir caminando
hasta la marcha. No les quedó más alternativa a este gobierno que abrir el
paso”, agregó.
A la cabeza de la Marcha, el líder opositor
Henrique Capriles se mostró satisfecho con la respuesta de los opositores,
calculando que más de un millón de personas se sumaron a la convocatoria.
“Hoy estamos dando una demostración de civismo, de
lo que somos los venezolanos, que los venezolanos vamos con nuestra
Constitución a lograr los cambios. Hoy no es el fin de nada, hoy es el inicio
de una nueva ruta de cara al 20% y de cara al referendo revocatorio”, dijo
Capriles.
Al final de la jornada, un grupo de manifestantes
más jóvenes protagonizaron un fuerte enfrentamiento contra la policía que
terminó en gases lacrimógenos y al menos, 20 detenidos.
Pero no sólo los opositores marcharon. Del lado chavista,
Nicolás Maduro hizo un llamado a defender su gobierno. Con un poder de
convocatoria mucho menor, el presidente venezolano aseguró haber detenido un
golpe de Estado de la oposición.
“Hoy hemos derrotado una intentona golpista que
pretendía llenar de violencia, de muerte a Venezuela y a Caracas”, sostuvo. “Si
ocurriera un 11 de abril algún día, y ustedes vieran que al presidente obrero
Nicolás Maduro le hicieron algo o asaltaron el poder, váyanse a las calles en
unión cívico-militar y hagan justicia y la revolución más radical que se haya
visto en esta tierra”, advirtió.
Por lo pronto, la oposición venezolana ha convocado
a nuevas movilizaciones: el 7 de septiembre hacia las oficinas regionales del
Consejo Nacional Electoral. Y el 14 de septiembre una concentración de 12 horas
en cada capital de estado de toda Venezuela. El objetivo es el mismo: realizar
un referendo revocatorio contra Nicolás Maduro.
PUBLICADO EL 02/09/16
POR INFOALLEN – MAIL: noticias@infoallen.com.ar