La situación data del 2008,
cuando el abusador convivía con su pareja y la hija de ella, aprovechando la situación de convivencia y
valiéndose de amenazas a la niña.
La Sala B de la Cámara Criminal
de la 1° Circunscripción, con asiento en Viedma resolvió condenar al padrastro
de una menor, a la pena de 12 años de prisión, por considerarlo autor
penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal, agravado
por su condición de tutor y por el aprovechamiento de la situación de
convivencia en forma continuada. El comunicado no ofrece el nombre del abusador.
PUBLICADO EL 07/12/2016