(Mirá la foto de como está ahora) Maxi Oliva fue el primer ganador de
"Cuestión de Peso" en el 2006, cuando pasó de 200 a 100 kilos,
pero ahora está en su peor momento: pesa 400 kilos y su vida corre peligro.
Oliva es uno de los 13 participantes de la nueva
temporada del programa, que se estrenó ayer por El Trece con la conducción de
Fabián Doman, y la suya se convirtió una de las historias que más impresionaron.
Maxi vive hace dos años postrado en su casa en
Lomas del Mirador, y hubo que hacer un operativo conjunto del que participaron
su familia, Defensa Civil, bomberos y un equipo médico para sacarlo de su
casa. En total, unas 70 personas estuvieron involucradas en una tarea que
incluyó romper paredes de la vivienda para que pueda pasar.
Sergio Verón, entrenador físico y coordinador
general del ciclo, manifestó que "en el momento del rescate la vida de
Maxi corría peligro", y señaló que el participante está internado en el
Hospital de Obesidad "porque necesitábamos una unidad de tratamiento
intensivo. No puede estar en cualquier lugar, en cualquier clínica y ni
siquiera en su casa".
El participante contó que intentó bajar de peso por
su cuenta, pero no lo logró. "Hará un año atrás traté de hacerlo solo, me
regalaron una balanza especial que era hasta 350 kilos y, cuando me subía, ya
pasaba más que eso", expresó.
Oliva, recordemos, tras ganar el reality volvió a
subir de peso e incluso demandó a la clínica de Alberto Cormillot por
abandono de persona, en el 2010.
Sin embargo, en aquella oportunidad regresó al
reality y perdonó al equipo médico. "Estoy así por mi culpa, yo me
metí todos estos kilos", sostuvo.
En 2013 tuvo otra recaída, y llegó a los 300
kilos. "Siento mucha culpa por no haberme mantenido. Soy todo o nada.
Me empecé a desesperar y empecé a comer de vuelta y no podía parar, con una
depresión muy grande", manifestó Maxi, que tiene una hija de siete años.
Ahora, tiene una nueva oportunidad.
PUBLICADO
EL 21-02-2017
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