Un juez viajó con su secretaria fuera del país, con pasajes comprados por la mujer de un preso



Es Martín Ordoqui, del Tribunal de Casación Penal bonaerense. En paralelo al viaje, le dio la libertad al detenido.

El juez Ordoqui y su jefa de despacho volaron finalmente a Chile, en un romántico viaje de Semana Santa que se convertiría, sin que lo supieran, en uno de los casos de coimas más comprobados de la historia judicial argentina.

El problema fue que, pese al vuelo de los tórtolos, el delincuente ‘favorecido’ no salió de prisión, porque otro fiscal apeló la resolución de Ordoqui y todo se complicó.

Ante esto, según la investigación, el delincuente se puso tan nervioso que el magistrado tuvo que ir en persona a verlo a la cárcel.

El chofer oficial del Juez declaró que, “entre abril y junio”, su jefe le pidió que lo llevara hasta la Unidad Penitenciaria N° 9. El dato se conocía pero ahora aparecieron escuchas telefónicas que lo convierten, directamente, en un escándalo.

El hombre que debe impartir ‘justicia’ está al borde de ser el primer juez del Tribunal de Casación destituido por corrupción, en una derivación de la causa que investiga a la banda del ex juez platense César Melazo. Pero no todo está perdido aún para Ordoqui: la propia Justicia está haciendo emotivos esfuerzos por salvarlo.

El juez cayó en desgracia el año pasado cuando un vendedor de autos procesado por doble asesinato, denunció que le había pagado 1.700.000 pesos para que le consiguiera la prisión domiciliaria con tobillera electrónica. Incluso, como prueba de su relación, mostró una cupé Torino roja que le habría comprado al juez.

Ordoqui inició sus tareas como abogado en la Municipalidad de Quilmes cuando el intendente era Aníbal Fernández. Se dice que fue él quien manejó el Peugeot 504 en cuyo baúl el propio Aníbal siempre negó haber escapado de la Policía en 1994 cuando fueron a detenerlo a la sede comunal por una causa de corrupción.

El camarista fue también su defensor en aquella causa penal y al poco tiempo se convirtió en secretario letrado del entonces flamante Tribunal de Casación bonaerense, el máximo organismo de la Justicia Penal de la provincia. Después fue nombrado juez en un Tribunal Oral de Quilmes y luego saltó a lo que es hoy: juez del propio Tribunal de Casación.

PUBLICADO EL: 09-02-2019


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