Racing sufrió un golpazo que le derrumbó la ilusión y lo dejó eliminado en los octavos del Apertura: Platense derrotó al equipo de Gustavo Costas que venía de lograr una goleada histórica en Colombia con un tanto de cabeza de Nicolás Orsini a los 38 minutos del segundo tiempo, apenas 180 segundos después de que el ex Unión, Boca y Lanús, entre otros, ingresara en reemplazo de Ronaldo Martínez. Ahora, luego de este triunfo histórico en el Cilindro de Avellaneda, el Calamar espera por el ganador de River-Barracas en cuartos de final.
Platense se plantó con convicción en el Cilindro de Avellaneda y generó la situación de gol más clara hasta el momento luego de un ataque del local mal resuelto por Santiago Solari: el punta de Platense metió un cabezazo que había superado al arquero Gabriel Arias y el palo derecho salvó a Racing, a los 13'.
El equipo de Costas cambió la fórmula inicial y empezó a complicar a su rival a través de centros: primero, con un cabezazo de Nardoni tras un corner y luego, con un frentazo débil de Solari a las manos de Cozzani luego de un centro desde la izquierda. De todos modos, la situación más peligrosa de Racing en el PT fue un zurdazo cruzado de Salas que el arquero de Platense pudo manotear. Y luego de esa acción llegó una contra del visitante que terminó en un gol de Ronaldo Martínez invalidado por posición adelantada que fue chequeada por el VAR.
En el segundo tiempo le sumó intensidad a su desprolijo juego y está metiendo al Calamar contra su propio arco gracias al empuje colectivo y a la potencia física de Maxi Salas y Maravilla Martínez en los metros finales. El equipo de Gustavo Costas aún carece de profundidad como la que había tenido en un puñado de jugadas de la primera etapa, aunque igualmente logró construir una lúcida jugada colectiva por la banda derecha que terminó en un picante centro que el volante Richard Sánchez definió desviado con un forzado zurdazo desde el piso.